Valley fiebre es causada por un hongo llamado
Coccidioides immitis Windows que se encuentra generalmente en el suelo del suroeste de los Estados Unidos, el norte de México, y en partes de América Central y del Sur. Esta enfermedad también se conoce como coccidioidomicosis, San Joaquín fiebre del valle, la fiebre del valle de California, o fiebre del desierto. La inhalación de partículas de suelo que contienen las esporas de este hongo causa esta condición. Estas esporas propagan en el aire cuando se perturba el suelo. Esto puede suceder durante calamidades naturales, como los terremotos, durante los trabajos de construcción, o las actividades agrícolas. Por lo tanto, trabajadores de la construcción y los agricultores son más propensos a la fiebre del valle, que no es contagiosa. Por lo general, la enfermedad afecta a los pulmones, pero también puede extenderse a otras partes del cuerpo
Los síntomas
Esta condición se puede clasificar en tres formas -. Agudo, crónico y diseminada. Fiebre del Valle aguda se caracteriza con síntomas leves o no. Los síntomas gripales aparecen después de dos a tres semanas de exposición, e incluyen fiebre, dolor de cabeza, escalofríos, debilidad, dolor de pecho, erupciones cutáneas y dolor en las articulaciones. Si la persona infectada no desarrolla ningún síntoma, la enfermedad sólo se puede diagnosticar a través de una prueba de la piel o la sangre. Una radiografía de rutina puede detectar la presencia de nódulos en los pulmones. Si la persona infectada desarrolla síntomas graves, al menos seis meses de tratamiento se necesita para recuperarse.
Fiebre del valle crónica es como neumonía crónica. Si la infección inicial no se trata adecuadamente, la recurrencia de vez en cuando es posible. Por lo general, estas recurrencias se presenta en personas con diabetes, y los que tienen un sistema inmunológico débil. Los síntomas incluyen fiebre, tos, expectoración con reflejos de sangre, tos y nódulos en los pulmones. Los que no pueden recuperarse de la fiebre del valle aguda pueden también desarrollar la variante crónica.
Fiebre del valle diseminada es la propagación de la infección de los pulmones a otras partes, como la piel, los huesos, el hígado, el cerebro, el corazón y el médula espinal. Produce síntomas, como lesiones en la piel, nódulos, hinchazón de las articulaciones, lesiones dolorosas en el cráneo, los huesos y la columna vertebral, y la meningitis.
Factores de Riesgo
El principal factor de riesgo es la exposición al polvo y el suelo de esas zonas, donde la fiebre del valle es común. Las personas que viven en esa zona, los que viajan a través del lugar, los trabajadores agrícolas, ganaderos, arqueólogos, personal militar en los ejercicios de campo, obreros de la construcción y carreteras, etc., son propensos a esta enfermedad. Las mujeres embarazadas, los ancianos, los pacientes con VIH, diabéticos, fumadores empedernidos, y los que tienen un sistema inmunológico débil, son más susceptibles que otros. Los filipinos, hispanos, personas de ascendencia africana, y los asiáticos son más propensos a ser infectados, que los caucásicos. También se encontró que, aparte de los seres humanos, perros, ganado, animales de granja, simios, monos, canguros, algunos animales silvestres y mamíferos marinos, también pueden infectarse por
Coccidioides immitis
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tratamiento
fiebre del valle aguda no requiere ningún tratamiento. Es como la gripe común y puede aliviarse con el reposo absoluto en cama y la ingesta de mucho líquido. Si los síntomas persisten o se agravan, la medicación antifúngica se prescribe. Si la condición del paciente es grave, se utilizan fármacos antimicóticos entonces por vía intravenosa. En la actualidad, no existe ninguna vacuna disponible para curar la fiebre del valle.
Algunas medidas efectivas se pueden tomar para prevenir la fiebre del valle. Se puede usar una máscara y protegerse contra la inhalación del polvo. Quedarse en casa y cerrar las puertas, ventanas y conductos de ventilación, durante una tormenta. Humedecer el suelo antes de excavar, como medida de precaución. El último y más importante es consultar a un médico tan pronto como aparezcan los síntomas
exención de responsabilidad
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Este artículo es sólo para fines informativos y no debe ser usado como una reemplazo para el consejo médico experto. Visitar a su médico es la forma más segura para diagnosticar y tratar cualquier condición de salud.