debo disculpas. Nunca hago esto, nunca. Por "esto", me refiero a escribir en primera persona. Publiqué una novela con un nombre falso y la mayoría de mis artículos son clínicos, individual. Me tienden a alejarse de las emociones y sentimientos y por mis propias razones. Sin embargo, por el bien de mi salud mental, me siento que tengo que hacer esto y aquí vamos. Perdí a mi hermana. Más bien, mi hermana murió. Era joven, estaba sana (hasta que el cáncer de mama) y ahora está muerta. Ahora estoy atascado tratando de encontrar la manera de seguir adelante con mi pérdida.
Mi hermana era la más joven, pero sólo en el sentido de haber tenido un menor número de tortas de celebración. Ella era siempre la más lógica, razonable y ordenó a uno, incluso cuando éramos niños. Ella tenía su lado imaginativo, creativo, pero nunca se sintió como que necesitaba para perfeccionar sus habilidades. Yo, por el contrario iba a escribir durante horas y horas, en los días antes de los ordenadores personales. Si yo no estaba escribiendo, yo estaba fuera de la lectura. Tuvimos nuestros juegos secretos, nuestra lengua y nuestros propios chistes. Yo era su protector. Ella me mantuvo de volar fuera de la zona central.
El cáncer de mama es una cosa terrible a cara, no importa quién eres o la edad que tengas. Ella me llamó esa noche, presa del pánico, el miedo en su voz clara como una luna de plata en una noche sin nubes. Fui a modo de hermana mayor, calmarla, asegurándole que tendría que hacerse ver y que ella estaría bien y si no, entonces se enfrentaría a lo que fuera, juntos. Era un jueves, tuvo que esperar hasta el lunes para una cita. Estimados doctores, Dios no lo quiera que alguna vez tiene que preocuparse de que tiene un asesino potencial dentro de ti y que tendría que esperar un fin de semana completo para conseguir incluso cosas desprotegido. Llegó el lunes y la noticia era sombría y desde ese día, la noticia era siempre el mismo; severo. Se enfrentó con buena cara y una actitud amable pero sé que tenía miedo
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Después de una mastectomía, quimioterapia y radiación seguida de todos los ensayos clínicos que apenas lo hizo en, los médicos finalmente le dijo que se eran al final. No había nada más que pudieran hacer por ella. Entró en cuidados paliativos y tres semanas más tarde, se había ido. He llegado a mi teléfono a su texto, para llamarla. Incluso fui a tomar una foto de mi hija en la ropa de la escuela, una tradición que hemos tenido desde el chico empezó la escuela.
Ella era mi única hermana, pero más, ella fue mi primer mejor amigo y la única persona que sabía que siempre podía contar, no importa qué. No sé cómo puedo enfrentar la vida sin ella.