Un estudio realizado en 1998 por investigadores de la Universidad Estatal de Ohio indica que un tercio de los niños asmáticos de entre seis y 18 años tienen algún tipo de reacción adversa después de una visita al dentista. Alrededor del 15 por ciento sufre una función pulmonar reducida temporal. Aunque no está claro lo que causa la reacción, se ha sugerido que los alérgenos tales como hisopos de algodón o de vapor de agua en el consultorio dental podría ser una causa. El estrés asociado a menudo con una visita al dentista se ha descartado como factor.Researchers mide el volumen de aire en los pulmones haciendo que los niños asmáticos soplan en una máquina llamada espirómetro. Las lecturas se tomaron antes, inmediatamente después y 30 minutos después del tratamiento. También se observaron las reacciones durante el examen. La mayoría de los síntomas eran reacciones leves como la tos y la congestión. Sin embargo, casi el siete por ciento de los pacientes monitorizados tenía dificultad para respirar 30 minutos después de estar en el consultorio dental. Sorprendentemente, algunos de sus síntomas no apareció hasta tres días después. Los profesionales dentales están capacitados para desarrollar protocolos de prevención en el consultorio dental y reconocer los primeros signos de un ataque de asma. ¿La razón? En 1998, el número de enfermos de asma en los Estados Unidos fue un estimado de 17,3 millones de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. 4,8 millones de ellos son niños. Tiene sentido para prepararse para lo que podría ser un fenómeno frecuente en nuestra oficina. Los investigadores sugieren que una bocanada de un inhalador antes de entrar en la oficina podría ser todo lo necesario para evitar un sufrimiento innecesario. Para su propia tranquilidad, podría ser prudente para hablar con su médico acerca de la posibilidad de una reacción antes de que su niño asmático visita nuestra office.Poor Salud Dental: La Academia Americana de Odontología Pediátrica informó un interesante descubrimiento en 1998. Los investigadores británicos probado niños asmáticos (cuatro a 16 las edades) para ver si mostraban preponderancia de enfermedades dentales. Los resultados mostraron claramente a los niños asmáticos sufren significativamente de placa y la gingivitis, que tienen peor salud de las encías y una mayor pérdida de superficie de los dientes en comparación con los niños no asmáticos. Una explicación podría ser que ciertos medicamentos utilizados para tratar el asma están causando daño a los dientes. El Departamento de Odontología Pediátrica en el Instituto Dental de Leeds a prueba los niveles de acidez de algunos de los principales medicamentos asmáticos. Los investigadores encontraron las variedades en polvo eran lo suficientemente ácida para erosionar el esmalte dental. Se necesitan más pruebas para determinar si esta es la causa principal de las enfermedades dentales en los niños asmáticos. Hasta que se demuestre, los investigadores sugieren eliminar cualquier rastro de un enjuague la boca con agua después de tomar un medicamento para el asma en polvo.