es una condición que se produce cuando los ventrículos del corazón no funcionan correctamente. Esta condición es particularmente peligroso para los pacientes y con frecuencia da lugar a muy altas tasas de mortalidad. Los estudios actuales indican que hasta un 50% de los pacientes que son diagnosticados con shock cardiogénico que no sobreviven. Por esta razón, los cardiólogos tratan a sospechosos o casos de shock cardiogénico confirmaron muy en serio. Los indicadores iniciales de shock cardiogénico incluyen, piel fría y húmeda, pulso débil, diuresis disminuida, alteración del estado mental (es decir, confusión, desorientación), y la presión arterial que es menor de 90 mm Hg durante al menos 30 minutos de tiempo. A veces, el choque se debe a daños en el corazón se haya incurrido durante un infarto de miocardio (ataque al corazón). En otras ocasiones, las causas pueden ser arritmia, cardiomiopatía, problemas en las válvulas o enfermedad, u otros defectos estructurales del corazón. Para diagnosticar una enfermedad del corazón, tales como choque, el cardiólogo intentará reunir información acerca de la aparición de los síntomas, cualquier lesión previa al corazón, u otros detalles relacionados. Por lo general, los pacientes que han sufrido un infarto agudo de miocardio se han experimentado síntomas comunes de esta dentro de los últimos días, incluyendo dolor torácico agudo. En otras ocasiones, los pacientes ya han sufrido un ataque al corazón, pero sin saber así, y en su lugar van a empezar a tener mareos y debilidad. En los individuos con antecedentes de arritmias cardíacas, los únicos signos perceptibles pueden venir en forma de una mayor sensación de palpitaciones, mareos, o sentimientos de su corazón "perder el ritmo". Para un pocos desafortunado, por el momento en que lleguen consultorio de un médico, pueden ser tan enfermos que no pueden proporcionar datos precisos para el médico. Independientemente de la cantidad (o poco) la información del paciente puede proporcionar, el cardiólogo se procederá a un examen para determinar el alcance de las manifestaciones físicas de la enfermedad. Normalmente, los pacientes que sufren de shock cardiogénico tendrán una presión arterial sistólica inferior a 90 mm Hg. En general, los pacientes tendrán una tasa respiratoria aumentado - esto se debe a sus intentos de superar los niveles de oxígeno reducidos. El cardiólogo también comparar el pulso yugular con el pulso detectable en las muñecas - el pulso yugular será normalmente más fuerte de lo habitual en los pacientes que sufren de choque cardiogénico. El pulso periférico (en la muñeca) será más débil, lo que demuestra la falta de flujo sanguíneo a las extremidades. También debido a un flujo sanguíneo disminuido a estas áreas, las extremidades pueden estar hinchados y pueden estar fría y húmeda. Además del examen físico, un cardiólogo también puede ordenar exámenes de sangre para verificar si hay signos de problemas cardíacos. Por ejemplo, un paciente que ha sufrido recientemente un ataque al corazón tendrá marcadores específicos en la sangre, tales como enzimas cardíacas específica (CPK-MB, troponina). Otros indicios que pueden venir en forma de elevación de la creatinina y transaminasas; Estos pueden estar presentes en la sangre si los riñones y el hígado han comenzado a fallar (que es un resultado de shock cardiogénico). El cardiólogo puede tomar todos estos signos y síntomas en conjunto para evaluar con mayor precisión el estado del paciente y la necesidad de tratamiento.