artritis, una inflamación de las articulaciones óseas, se caracteriza generalmente como una enfermedad que afecta a personas mayores de 50, por lo que puede venir como una gran sorpresa para los padres cuando sus hijos se les diagnostica alguna forma de ella. Lo que puede ser aún más sorprendente es que aproximadamente 300.000 niños en los Estados Unidos solamente tienen artritis, y el público es en gran parte inconsciente de este hecho. La forma más común de artritis que afecta a los niños se denomina artritis reumatoide juvenil, que afecta a alrededor del 20% de los 300.000 niños, y todos los padres deben ser educados sobre esta enfermedad debilitante en niños. Los médicos aún no están del todo seguros de qué causa la artritis reumatoide juvenil, pero creen que está vinculada a las enfermedades autoinmunes, donde las células blancas de la sangre son incapaces de diferenciar entre células normales y extranjeros.
Los síntomas familiares
Si un niño tiene artritis reumatoide juvenil, los padres pueden comenzar inmediatamente a notar cojera u otros signos de dolor entre las articulaciones. Aunque no es poco común entre los niños por sí mismo, otros síntomas pueden incluir erupciones y picos febriles. Si cualquiera de estos síntomas por un período prolongado de tiempo, un médico debe ser consultado. Cuanto más rápido sea el diagnóstico, menos daño se producirá al cartílago y las articulaciones afectadas por la artritis reumatoide juvenil.
Diagnóstico
La artritis reumatoide juvenil se diagnostica fácilmente a través de una amplia gama de pruebas, no todos que necesitan ser realizadas (aunque al menos varias probable será). Las herramientas de diagnóstico incluyen análisis de sangre, rayos X y exámenes físicos completos. Además, las pruebas para otras enfermedades relacionadas con la artritis reumatoide juvenil pueden llevar a cabo, además de la remisión a un cirujano ortopédico para tomar muestras de líquido de la articulación para la prueba y su posterior análisis. El diagnóstico suele tardar varios días, y después, el pediatra o médico trabajará junto con el cirujano ortopédico y otros profesionales de la medicina para desarrollar una estrategia para curar al niño de la artritis reumatoide juvenil.
fácilmente tratable
La buena noticia para los padres es que la artritis reumatoide juvenil es fácil de tratar. Los médicos pueden recetar medicamentos para ayudar con la hinchazón y la inflamación y la derivación a un fisioterapeuta. Los fisioterapeutas generalmente señalan ejercicios para mejorar la artritis y mejorar la resistencia muscular y la flexibilidad de las articulaciones. Además, el ejercicio regular es vital para asegurar que el niño está protegido contra otros artritis mediante la protección de los huesos y articulaciones. El tratamiento tiene dos propósitos:. Para proteger y reparar las articulaciones del daño mientras reduce o elimina la inflamación y el dolor
La artritis juvenil reumatoide puede ser un concepto inquietante para los padres, y puede hacer que la vida de un niño infeliz. Esta enfermedad puede dañar sus habilidades sociales y hace irritables mientras que dificulta su desarrollo físico. Sin embargo, a través de un diagnóstico rápido y fácil tratamiento, los padres pueden asegurar que sus hijos no se verán perjudicados por la artritis reumatoide juvenil.