El cáncer de pulmón se divide generalmente en dos categorías principales; de células pequeñas y de células pequeñas no. El cáncer de pulmón de célula se divide a su vez en varias subcategorías adicionales. La gran mayoría (aproximadamente el 80 por ciento) de las personas diagnosticadas tiene pequeñas de cáncer de pulmón de células no.
Los síntomas del cáncer de pulmón de células no pequeñas incluyen falta de aliento, dolor en el pecho, tos con sangre, fatiga, fiebre y pérdida de peso, y es por lo general se diagnostica mediante imágenes, biopsia pulmonar, y /o análisis de sangre. Normalmente estos síntomas no se manifiestan hasta que la enfermedad se ha extendido, haciendo que el tratamiento sea mucho más difícil.
Dependiendo de qué tipo de cáncer de pulmón no microcítico está presente, el escenario es en, la ubicación exacta de la masa cancerosa, el número y tipo de síntomas presentes y la salud general del paciente determinará el resultado del tratamiento.
Si la enfermedad se detecta a tiempo, puede ser tratada mediante cirugía y las probabilidades de derrotar a que son bastante buenos. Una vez que se propaga a los tejidos del pecho circundantes y los ganglios linfáticos, la quimioterapia y la radioterapia se utilizan para el tratamiento. La tasa de supervivencia de cinco años para el cáncer de pulmón no microcítico, si se detecta en las primeras etapas, es superior al 50 por ciento. Sin embargo, si se ha alcanzado una etapa avanzada, la tasa de supervivencia cae a un deprimente dos por ciento.
Las buenas noticias, el cáncer de pulmón no microcítico no es tan agresivo como el cáncer de pulmón de células pequeñas, si una persona ha sido diagnosticado con eso, ellos tienen la suerte de sobrevivir dos a cuatro meses.
Aproximadamente el 25 por ciento de las veces, no hay síntomas en el paciente, y el cáncer se detecta durante un examen de rutina. Sin embargo, en el 75 por ciento de los casos, hay síntomas que están presentes.
Así que si usted o un ser querido, tiene alguno de los síntomas comunes, falta de aliento, tos arterial, fatiga, dolor en el pecho o la pérdida de peso inexplicable, programe una cita con su médico de cabecera, que puede ejecutar las pruebas necesarias para determinar lo que está sufriendo. Recuerde, las probabilidades de derrotar a esta enfermedad son mucho mejor que la anterior se le diagnostica.