Los exámenes regulares de seguimiento; incluyendo un examen pélvico, una prueba de Papanicolaou y otras pruebas de laboratorio, son muy importantes para cualquier mujer que ha sido tratado por los cambios en el cuello uterino o cáncer de cuello uterino. La mujer debe tener pruebas y exámenes frecuentes para varios años para que el médico pueda comprobar que no existen indicios de que la condición ha regresado.
El tratamiento del cáncer puede causar efectos secundarios, muchos años después. Por esta razón, los pacientes deben continuar con las revisiones regulares y deben informar de cualquier problema de salud que aparecen.
Vivir con una enfermedad grave no es fácil. Los pacientes de cáncer y los que se preocupan por ellos se enfrentan a muchos problemas y retos. El hacer frente a estos problemas es a menudo más fácil cuando las personas tienen servicios de información y de apoyo resultan útiles.
Algunas preocupaciones de que los pacientes con cáncer pueden enfrentar puede incluir la celebración de su trabajo, el cuidado de su familia, o mantenerse al día con las actividades diarias. Las preocupaciones sobre las pruebas, tratamientos, estancias en el hospital y los gastos médicos son comunes. Los médicos, enfermeras y otros miembros del equipo de atención médica pueden responder preguntas sobre el tratamiento, el trabajo y otras actividades. Además, la reunión con un trabajador social, consejero, o un miembro del clero puede ser útil para los pacientes que quieren hablar sobre sus sentimientos o discutir sus preocupaciones.
Los amigos y familiares pueden ser un gran apoyo. Además, ayuda a muchos pacientes a discutir sus preocupaciones con otras personas que tienen cáncer. Los pacientes de cáncer a menudo se reúnen en grupos de apoyo, donde pueden compartir lo que han aprendido sobre cómo lidiar con el cáncer y los efectos del tratamiento. Es importante tener en cuenta, sin embargo, que cada paciente es diferente. Los tratamientos y formas de tratar el cáncer que funciona para una persona puede no serlo para otro, aunque ambos tienen el mismo tipo de cáncer. Es una buena idea para discutir el consejo de amigos y familiares con el médico.
A menudo, un trabajador social del hospital o clínica puede sugerir grupos que pueden ayudar con la rehabilitación, emocional el apoyo, la ayuda financiera, el transporte o la atención domiciliaria.