El sombrero se ha convertido una vez más en el mundo de la moda y la razón puede ser debido al aumento dramático en el cáncer de piel conocido como melanoma, el más mortal de los tipos conocidos de cáncer de piel.
Antes de 1950 El melanoma se rara vez se diagnostica. En los últimos años, esta enfermedad ha tenido un aumento dramático en el grupo de edad menor de 40 años. Parece que los años de disfrutar del sol, durante los meses más cálidos, sin llevar puesto un sombrero ha pasado factura a nuestra salud y, finalmente, nos hemos dado cuenta del propósito funcional del sombrero.
El científico había predicho desde hace muchos años , que el efecto de aumentar los rayos UV que llega a la tierra, debido al agujero en la capa de ozono, tendría un efecto de escala amplia sobre el sistema inmune humano y un efecto devastador sobre la piel. Los estudios clínicos han demostrado que la exposición excesiva al sol puede tardar años en aparecer y los efectos son en forma de envejecimiento, manchas de la edad o del hígado prematuros y /o cáncer de piel.
El uso de una sombrero, que proporciona sombra a su cara, el cuello y las orejas, puede desempeñar un papel importante en la prevención de los efectos del sol sobre la piel. La Sociedad Americana del Cáncer y el Instituto de Cáncer de la piel sugieren que un ala del sombrero, de 2 a 4 pulgadas proporcionará suficiente sombra del sol -
sino un ala más ancha puede llegar a ser una mejor protección para los que tienen todo listo experimentado alguna forma de cáncer de piel. Para un sombrero para proporcionar la máxima protección contra el sol, debe ser una de un material de tejido apretado, que suele ser la paja o tela
Sombreros hechos específicamente para protegerse del sol -. Tales como el sombrero legionarios, el safari sombrero, el sombrero interior - han existido por años y fueron creadas para proteger la cabeza y el área facial del sol. La mayoría de nosotros asocia estos sombreros con ocupaciones específicas y ubicaciones geográficas con climas más cálidos. Ahora sabemos que la geografía ya no juega un papel en si ponemos en práctica activamente la protección solar adecuada. Las excusas, hemos utilizado en el pasado, para justificar que no lleva puesto un sombrero ya no son válidos. A medida que continuamos a erosionar la capa de ozono con los hidrocarburos y las emisiones de combustibles fósiles, los rayos UV seguirán aumentando y que verán un aumento aún mayor en el número de personas con cáncer de piel. Ya no importa si los sombreros están de moda o no. Usar un sombrero ahora se ha convertido en una inversión en nuestro futuro bienestar.